Orgasmos con consciencia: naturales, ecológicos y veganos
Si el otro día te dábamos algunos tips para poder llevar una vida más eco-friendly hoy te traemos un super notición: ya puedes tener orgasmos con conciencia medioambiental.
Si el otro día te dábamos algunos tips para poder llevar una vida más eco-friendly hoy te traemos un super notición: ya puedes tener orgasmos con conciencia medioambiental.
Ya sabéis que en Lubets somos muy cachondos (en el sentido amplio del término) y que lo nuestro es hacer fluir el buen rollo, y es por ello que este verano sacamos una acción muy como nosotros: sin límites.
Y es que básicamente nos metimos en las cenas delivery. Sí, sí, tal como los has leído. Ponte en situación: fin de semana caluroso, estás en casa con tu pareja (o no, ahí ya no nos metemos) y pasas de cocinar, una opción te ronda por la cabeza y sueltas la pregunta... ¿Pedimos algo? ¿Sushi? ¿Poke? ¿Mejicano?
¡Cualquiera de las 3 nos sirve! Porque haciendo tu pedido en Arepa Olé, True Sushi o Mahalo te esperaba una sorpresa en forma de postre.
Lubets: somos el postre para compartir
¿Se te ocurre una manera mejor de terminar una noche tórrida? Puestos a pasar calor, mejor sudemos de placer. Y después de una buena cena nada entra mejor que un postre delicioso y más cuando en la carta solo hay una opción: tú.
Por eso, Lubets es el mejor postre para compartir y terminar la velada por todo lo alto, ¡dejándose llevar! Y oye, quién sabe, igual ayudamos a más de uno/a a dar el paso que no se atrevía a dar y entre “jiji, jaja” ¡toma resbalón!
Aunque en el calendario veamos septiembre y hayamos vuelto a la rutina hay algo que no ha cambiado: sigue haciendo calor.
Puede que una parte de nosotros esté ya anhelando el cambio de armario, acurrucarse bajo el nórdico y tomarse un té calentito, pero de momento el tiempo no invita a ello. En cambio, sí que nos invita a exprimir hasta la última gota del verano, por eso, aunque ya no estemos de vacaciones, hoy queremos hablaros de gotas, de agua y de aceite y sobre todo de resbalar para quitarse el calor de encima.
Porque sí, aún es tiempo de resbalones en el agua, y seguro que si lo has probado alguna vez te has dado cuenta de que no es tan idílico como en las películas, vamos, que el tema no termina de fluir del todo, ¿verdad?
Básicamente, porque como bien cuentan en este artículo de CUORE.ES
“amigui, aunque estés mojada de pies a cabeza necesitas un pequeño ayudante: un lubricante con base de aceite”.
Y es que, la lubricación natural de nuestro cuerpo se produce a base de agua por lo que si nos metemos en una piscina, playa, jacuzzi o incluso bañera, se diluye fácilmente, dejando la zona más seca que un desierto en agosto. Por lo que es importante asegurarse de que todo resbale bien para que esta fantasía sexual hecha realidad no termine en pesadilla.
En Lubets tenemos la solución perfecta para tus resbalones acuáticos: el lubricante base de aceite Lubets, un lubricante ecológico y de bolsillo, para que sea aún más práctico llevarlo encima.
Tu chapotea que nosotros nos asegurarémos de que sea una experiencia inolvidable y de que todo fluya como es debido. 100% natural, hecho con manteca de karité, aceite de coco, aceite de almendras dulces y aceite de jojoba, el lubricante Lubets base aceite cuidará de tu cuerpo y del medioambiente.
¡Nos gustan los orgamos con consciencia! Aquellos que son respetuosos con tu cuerpo y con nuestro planeta.
El lubricante base aceite Lubets está testado dermatológicamente y es apto para pieles sensibles gracias a sus ingredientes activos respetuosos con el pH de tu piel.
De uso externo, te encantará usarlo para resbalar bajo el agua o fuera de ella y para dar masajes (el final feliz lo pones tú). Pero recuerda que el uso de este tipo de lubricantes no es compatible ni con preservativos ni con juguetes.
Además, nuestros envases requieren el uso de un 50% menos de material que los botes habituales y el proceso de fabricación es de bajo impacto energético.
Así que ya solo nos queda por decirte: ¡Feliz chapuzón y que los Lubets te acompañen!
Siempre nos gusta dar con nuevos retos, experiencias y aventuras. Ahora, es momento de hacer clic ¡y que suba la temperatura!
El sexo suele encararse como una una carrera hacia el orgasmo cuando en el fondo lo que deberíamos hacer es dedicarnos a disfrutar más del trayecto. Porque, por mucho que a todos nos gusta llegar hasta el final, a veces no es fácil, y si encima nos metemos presión y prisas para conseguir un orgasmo, mal vamos.
Así que, relájate, disfruta del trayecto y echa mano del potenciador de orgasmo femenino de Lubets y verás como tiemblan hasta las paredes de tu casa. Pero por si acaso, aquí te dejamos 5 posturas que harán que llegar al clímax sea mucho más sencillo-oooh ;)
Advertencia: en Lubets nos preocupamos por tu vida sexual pero no gestionamos posibles quejas de vecinos producidas por los ruidos de placer derivados del uso de nuestros productos.
Colócate encima y disfruta del poder: tú decides velocidad, tiempos e inclinación. Rodea con tus piernas la cintura de tu pareja y muévete arriba y abajo, como si de una mecedora se tratara.
2. Ponlos a su alcance
Inclínate de manera que mientras estás encima de tu pareja tus pezones queden al alcance de su boca. Si combinas el hecho de estar controlando tú el ritmo, con la penetración y la estimulación de tus pezones, las posibilidades de alcanzar el orgasmo se multiplican exponencialmente. Así que, ¡a disfrutar!
Masturbación y penetración: ¡combo ganador! Hay un montón de posturas (tú encima, tú encima de espaldas, el misionero con él ligeramente incorporado…) que te permiten estimular o que estimulen tu clítoris durante el sexo. ¿Con cuál te atreves primero?
Sí, ¡tal cual! Resulta que esta postura no solo es ideal para acurrucarse en invierno sino que también nos ayuda a conseguir llegar al orgasmo. Levanta ligeramente la pierna superior para que la penetración sea más profunda y usa tus manos para… bueno, para lo que te hemos contado en el punto anterior ;)
Puede que de entrada el misionero no sea una postura muy alocada, pero es que no hace falta volverse loco para conseguir un orgasmo, sirve con saber qué estás haciendo. Y cuando hablamos del misionero hablamos de contacto visual, penetración profunda, conexión con tu pareja y manos libres para ponerlas donde quieras. Vamos… ¿Cómo no iba a funcionar?
¿Quieres un extra? Accede al potenciador femenino de Lubets ¡Haz clic, en todos los sentidos!
Ay… el calor, las noches de verano, la subida de temperatura o simplemente las ganas que hace tiempo que os estáis aguantando. Todo ello se convierte en un cóctel letal que hace que un día mires a tu amigo/amiga y pienses “¿por qué no?” y ya la hemos liado. Pero… ¿Hay vida después de este resbalón?
El sexo con amigos muchas veces acaba con la amistad.
O esa es la idea que se le ha metido a todo el mundo por activa y por pasiva, aunque a nosotros nos suena a tópico. (¡Igual que el uso del lubricante solo para cuando hay sequedad! ¡Lo que os estáis perdiendo!)
Parece que se ha construido un muro inquebrantable en la relaciones entre amigos. Pero...¿De verdad es inquebrantable?
¿De verdad vas a perder una amistad de años por un resbalón en el que ambos estáis disfrutando?
Pues...tenemos una buena noticia.
Hemos estado buscando información al respecto, y aunque a nivel general son muchos estudios los que afirman que tener buenos resbalones con buenos amigos es perjudicial, hemos podido confirmar que...es...
FALSO
La universidad estatal de Boise, en EE.UU, lo ha confirmado en un amplio estudio, se hicieron preguntas a 300 personas y más del 75% de las personas que habían mantenido sexo con un amigo o amiga, confirmaban que la relación entre ellos se había fortalecido, que se sentían más unidos y que la amistad era mucho mejor después de ese gustazo.
Así que...manga ancha y siempre con un as bajo la manga.
Eso sí, los sentimientos tienen que echarse a un lado y ir al directos al "clic" para no confundirse ni generar malos entendidos.
Es verano, las temperaturas suben...
¿Te mojas con lubets? ¿Listo para el friendclic?
Por cierto, tenemos el regalo ideal para que tu amigo capte todas las indirectas.